Montenegro

Es uno de los países menos visitados de Europa y años atrás formaba parte de la antigua Yugoslavia.
Al entrar en el territorio montenegrino, en mi punto de vista tal como lo vi, era como un lugar atrapado en el pasado; los coches eran de esas marcas que ya no existen, los precios eran realmente bajos, no abundaba un aire de turismo y el paisaje era muy salvaje y bastante virgen. Lo gracioso era que los limites de velocidad oscilaban entre  los 40 y 60km/h, si eres un conductor inquieto lo te estresarás mucho.
Los sitios que no puedes perderte son las gargantas de Kotor(lugar montañoso donde penetra el mar), Sveti Stefan(un antiguo monasterio) y Petrovac un pequeño pueblo pesquero y turístico ideal para descansar. Se respiran aires de la antigua República Yugoslava es como una cultura que murió hace décadas y en este pequeño y extraño país sigue intacta. Os recomiendo que lo visitéis lo mas pronto posible porque dentro de unas décadas ya habrá sido influenciado por la globalizacion y ya no tendrá la misma esencia.